CARSHARING O LA MODA DE COMPARTIR COCHE

Actualmente, se han puesto muy de moda las compañías del carsharing, las cuales hay que englobar en la economía colaborativa. Pero hemos de tener muy en cuenta que compartir un vehículo con personas desconocidas puede entrañar algunos inconvenientes.

Lo primero de todo, por si no se está familiarizado con el término carsharing, es señalar en cómo funciona:

  • Hay que Reservar el vehículo a través de una web o app. Antes debes registrarte para que te manden una tarjeta.
  • Lo recoges en uno de los parkings habilitados. La tarjeta te permitirá abrir el vehículo.
  • Los precios son por hora o por día. Las tarifas de alquiler incluyen combustible, mantenimiento, asistencia y seguro. Puede que haya que sumarle el kilometraje extra y/o cuota mensual.

Todos los servicios de carsharing disponen de seguros con franquicia (aunque algunos ofrecen suplementos para eliminarla o fórmulas para disminuirlas). Es decir, en caso de daños, el usuario tendrá que pagar la reparación hasta el importe de la franquicia.

¿Qué hacer para evitar sorpresas?

Para evitar que se nos atribuyan daños al coche que nunca hemos causado, es recomendable que revisemos el vehículo antes de empezar el alquiler, es decir, se tomarán fotografías del vehículo por los cuatro lados. Asimismo, tendremos que hacer lo mismo al dejar el coche, ya que alguien podría golpearlo o rozarlo entre alquiler y alquiler, con el único objetivo que no nos atribuyan estos daños.

Si el vehículo tiene desperfectos que no se encuentran señalados en la aplicación, debemos informar a la compañía de carsharing y renunciaremos al alquiler. Si no lo hacemos, el arrendador podrá reclamarnos todo lo que haya surgido. También debemos extremar las precauciones al aparcar para evitar posibles daños en el vehículo.

En relación con el mínimo exigible en cuanto a seguros para cualquier coche es el llamado seguro a terceros, que incluye la responsabilidad civil, obligatoria por ley. Este seguro a terceros cubre los daños materiales y personales que el coche asegurado provoca a terceros, pero excluye los daños que, en el mismo accidente, se generan al vehículo asegurado o al conductor. Si por desgracia tuvieras algún problema te recomendamos que contactes con un abogado especialista.